Aunque son capaces de ello no le dieron el Goya a la “mierda” de documental ‘El arte de “vender mierda”‘ (1). Intentar demostrar lo que conoce todo el mundo es un poco chorra. Como sabe todo quisqui engañar y durante mucho tiempo está en la mano de cualquiera que no valore mucho la ética y no solo en cuestiones de menor importancia. Basta con fijarse en aspectos de salud y de salud pública con los incontables tratamientos y medicamentos que pasaron todos los controles de agencias y organismos oficiales con gobiernos de todo tipo que debían garantizar su eficacia y balance positivo entre efectos secundarios perjudiciales y sus beneficios. En tantísimas ocasiones no es solo es que no funcionasen sino que causaron (y causan) todo tipo de daños, provocaron multitud de discapacidades y lo peor de todo innumerables muertes. No digamos ya en tóxicos, productos químicos o alimentarios donde la lista es inabarcable y no para de crecer. Si en temas de tantísima envergadura se consigue engañar haciendo tanto daño podemos hacernos una idea de lo que se puede conseguir en otros de menor calado.
La obsesión pseudoescéptica por atacar lo que se salga de la linea oficial y que pueda molestar a las Farmas que nos intentan convencer de que son las exclusivas portavoces de la verdad científica revelada llevó a dos de sus fieles seguidores a montar un timo con una pseudoterapia inventada que diera algo de risa a la que llamaron fecomagnetoterapia. Como cualquiera puede inventarse cualquier cosa y timar a la gente durante mucho tiempo no tuvieron demasiada difusión hasta que alguien hizo un corto sobre el montaje pseudoescéptico. Éste tuvo un gran apoyo entre quienes consideran (medios de comunicación incluidos) que engañar demuestra que se puede engañar y que en temas de salud sería peligroso. ¡Menuda revelación!. Ya se sabe que nuestro país tiene un nutrido grupo pseudoescéptico apoyado con mucha pasta por nuestro pseudoescéptico gobierno (y oposición) en su cruzada por blanquear el farmacapitalismo y difamar terapias y libertades que no controle la BigPharma.
A uno de los protagonistas del timo le vimos en la tele confrontando con el médico que intentaba salvar la vida a un paciente añadiendo tratamiento sin efectos secundarios relevantes, con la desesperada pretensión de evitar que se permitiese tal cosa. En el irresponsable programa TODO ES MENTIRA se afanaban como de costumbre en conseguir que no se difundiesen posibilidades no fuera que cundiese el ejemplo:
https://www.cuatro.com/todoesmentira/ozonoterapia-curar-covid-peligrosa-eficaz_18_3192272924.html
Juanfra tuvo suerte, un juez admitió la terapia que se le administró con escoltas policiales incluidas para conseguirlo:
https://www.elmundo.es/comunidad-valenciana/castellon/2021/08/18/611c1c68fc6c83374d8b4689.html
Otros pacientes no tuvieron tanta suerte (ni dinero) y el juez que les tocó denegó la petición para intentar sobrevivir incluso con casos en que primero autorizaban y a las pocas horas de desdecían. Increíble, triste y real.
Canal de Juanfra:
https://odysee.com/@JuanfraMart%C3%AD:d
(1)
El arte de “vender mierda” en un sorprendente corto documental nominado a los Goya